A los perros les encanta mordisquear casi cualquier cosa, es un comportamiento natural e instintivo para ellos, por ese motivo tienes que educar para que tu perro no muerda los muebles. De esta forma, podrás dejarlo solo y no tener sorpresas a tu vuelta a casa, no es especialmente agradable encontrarte la espuma de tu sofá esparcida por todo el salón.
Por qué mi perro muerde los muebles
Cuando son cachorros necesitan masticar todo lo que les rodea, es una forma de aliviar el dolor de sus dientes, mientras que los perros más mayores, mastican para desprenderse de posibles desechos que tengan entre sus dientes, así como mantener sus mandíbulas y dientes fuertes y saludables. Lo que tienes que conseguir no es que no muerda, sino ¡evitar que tu perro muerda tus muebles!
Morder y masticar los muebles puede ser peligroso para tu perro, ya que puede dañar sus dientes con la madera dura o esquinas afiladas, ingerir cera para muebles, trozos sueltos de tapicería o madera, o dañar su boca con las astillas.
Remedios caseros para que mi perro no muerda los muebles
Nuestras mascotas tienen necesidad en morder, cualquier método utilizado para evitar que utilicen los muebles como mordedor debe proporcionar una oportunidad alternativa y segura para ellos. Es más fácil entrenar a tu perro desde que es cachorro, de esta forma aprenderá a morder sus propios juguetes antes de acostumbrarse a morder tus muebles. Si tu perro ha comenzado a masticar muebles, deberá romper ese hábito y redirigirlo a los artículos adecuados para masticar.
Asegúrate de tener artículos adecuados para masticar, como pueden ser juguetes en los que pueda poner comida, huesos de cuero crudo u otros juguetes para masticar disponibles para perro. No uses artículos del hogar como zapatos u otros artículos personales que confundirán a tu perro.
3 Métodos para evitar que muerda los muebles
El método del hábito positivo
- Paso 1. Proporcionar juguetes para masticar. Desde una edad tan temprana como sea posible, desarrolla el hábito de jugar con tu perro proporcionándole muchos juguetes atractivos para masticar.
- Paso 2. Utilice alimentadores interactivos. Llene juguetes de goma huecos o comederos de rompecabezas con comida a la hora de comer.
- Paso 3. Reforzar los juguetes para masticar. Proporcione huesos de cuero crudo y conviértelos en juguetes jugando con tu perro, acariciándolo y prestándole atención mientras mastica su juguete apropiado, para fomentar el comportamiento de masticar juguetes.
- Paso 4. Ejercicio y actividad. Proporcione otros juguetes como pelotas para mantener a su perro activo y entretenido, para que no se aburra y se sienta tentado a prestar atención a los muebles u otros artículos domésticos inapropiados para entretenerse. Juegua con tu perro y ejercítelo mucho, use artículos para masticar apropiados como parte del juego y haga ejercicio para reforzar lo que tu perro puede masticar.
- Paso 5. Separado de muebles. Si tu perro ha comenzado a masticar muebles, manténgalo separado del objeto que le interesa masticar y refuerce los artículos de masticación adecuados hasta que se establezca un nuevo hábito de masticar.
El método de reclamo de muebles
- Paso 1. Bloquear el acceso. Si tu perro ha comenzado a masticar un mueble, bloquee su acceso a ese mueble cuando no esté supervisado.
- Paso 2. Comando ‘déjalo’. Bajo tu supervisión. espere hasta que tu perro se acerque a los muebles que ha estado masticando y coloque su cuerpo firmemente entre él y los muebles. Dé un comando «déjalo” o un firme “ No”.
- Paso 3. Empujar. Toca a tu perro en el costado para ejercer el liderazgo y reclamar el espacio, aléjelo con tu cuerpo.
- Paso 4. Reforzar ‘lejos’. Cuando tu perro se retire de los muebles, felicítalo y dale un elemento alternativo para masticar. Anímalo y felicítalo por masticar el artículo apropiado en un área separada de los muebles que ha masticado anteriormente.
- Paso 5. Establecer. Mantén la separación cuando no esté supervisado, y cuando esté vigilado no permita que se acerque siquiera a los muebles que son objeto de su hábito de masticar. Reclama los muebles como tu territorio, proporciona a tu perro un territorio alternativo y que mastique una alternativa, repita según sea necesario durante varios días hasta que se forme un nuevo y saludable hábito de masticar que no involucre sus muebles.
El método de disuasión
- Paso 1. Usa un disuasivo del sabor. Rocíe los muebles con un disuasivo de masticación comercial no tóxico y de mal sabor.
- Paso 2. Supervisar. Deberás supervisar a tu perro, ya que los elementos de disuasión por sí solos no siempre evitan que tu mascota pueda morder los muebles. Ten una consecuencia negativa alternativa disponible, como un generador de ruido fuerte.
- Paso 3. Usar generador de ruido. Cuando tu perro se acerque a los muebles y comience a masticar, active el dispositivo que hace ruido.
- Paso 4. Crear asociación negativa. Utilizado en combinación con el disuasivo del sabor, esto creará una asociación negativa entre el sabor y el ruido, y el comportamiento de masticación de los muebles.
- Paso 5. Proporcionar alternativas. Proporcione un elemento para masticar alternativo, como un hueso, en un lugar separado. Elogia y anima a tu perro a masticar el objeto apropiado. Recompénsalo con golosinas por masticar su juguete en vez de los muebles.
Con estos tres métodos conseguirás que tu perro no muerda los muebles cuando le dejes solo en casa. Si lo pones en práctica siguiendo nuestro método, coméntanos cómo te ha ido la experiencia en los comentarios que hay más abajo.
¡Ah, y no olvides disfrutar del entrenamiento con tu perro!